El informe ha sido redactado por una serie de expertos bajo la dirección de un comité directivo de 15 miembros copresidido por el Premio Nobel Mario Molina, Presidente del Centro Mario Molina, México, y Durwood Zaelke, Presidente del Instituto de Gobernanza y Desarrollo Sostenible, EE.UU. El informe cuenta también con el apoyo del Programa de Enfriamiento Eficiente de Kigali (K-CEP).
Según la oficina de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (United Nations Environment Programme) y la Agencia Internacional de Energía (International Energy Agency), se estima que casi un tercio de la población mundial se enfrenta temperaturas peligrosas durante más de 20 días al año, mientras que las olas de calor causan 12.000 muertes al año. Mantenerse fresco es un problema de salud y productividad. Necesitamos proporcionar un acceso equitativo a la refrigeración para proteger a las personas contra el calor extremo, mantener los alimentos frescos, las vacunas estables y mucho más. Pero a menos que cambiemos nuestro enfoque, la creciente demanda de refrigeración contribuirá significativamente al cambio climático, en parte a través de las emisiones de HFC y otros refrigerantes, y en parte a través de las emisiones de CO2 y carbono, de fuentes de energía basadas en combustibles fósiles, que alimentan los aires acondicionados y otros equipos de este análisis. En este momento, a medida que el clima se calienta, la creciente demanda contribuye a un mayor calentamiento, pero existen diferentes opciones. Este informe de síntesis explora los beneficios climáticos y económicos de la implementación de la política de Kigali y al mismo tiempo mejora la eficiencia de la refrigeración para las personas y el planeta. (https://wedocs.unep.org/handle/20.500.11822/33094
Ya en el reportaje de la Revista tendencias21, se indicaba: Se estima que hay 3.600 millones de equipos de refrigeración en uso en todo el mundo, que abarcan tanto a aparatos de aire acondicionado como neveras y congeladores.
El informe del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente estima que, si los equipos de refrigeración se generalizan a todas las personas que los necesitarán en un contexto de calentamiento global, estarán en funcionamiento hasta 14.000 millones de aparatos de refrigeración en el año 2050.
El informe dice también que, aunque los dispositivos de enfriamiento como los aires acondicionados y los refrigeradores, son cruciales para la salud humana, las emisiones de los combustibles fósiles utilizados para alimentarlos, podrían empeorar el cambio climático.
Especifica que la creciente demanda de refrigeración está contribuyendo significativamente al cambio climático, debido al consumo de combustibles fósiles que alimentan a los aires acondicionados y otros equipos de refrigeración.
E incluso se añadía en el reportaje, de conformidad con lo expresado por el referido informe: Los aparatos de aire acondicionado están en la diana del calentamiento global porque consumen energía contaminante y además emiten hidrofluorocarbonos, unos gases de efecto invernadero mucho más dañinos para el medio ambiente que el dióxido de carbono (CO2).
Se desencadena así un círculo vicioso que se retroalimenta continuamente: la escalada de la temperatura aumenta las necesidades de refrescar el aire que respiramos, y ese servicio tecnológico aumenta todavía más el calor del entorno en el que vivimos.
En 1987, el Protocolo de Montreal estableció un plan para eliminar los contaminantes nocivos en el uso de los refrigerantes.
En 2019, entró en vigor enmienda al citado protocolo con la finalidad de reducir la producción y el consumo de hidrofluorocarbonos (HFC) en más de un 80% durante los próximos 30 años, pero todavía no lo han firmado los países más contaminantes, como Estados Unidos, India y China.
Pero es necesario matizar estas afirmaciones, por un lado, en Europa existe ya una normativa coherente con el Protocolo de Montreal, por lo que este sector ya no usa hidrofluorocarbonos (HFC), por lo que no plantean esa posible nociva contaminación. Son los grandes consumidores de frio: Estados Unidos, India y China, los que incumplen el acuerdo y siguen contaminando la atmosfera con los HFC.
Por otro lado, en el reportaje se decía también que los aparatos de aire acondicionado…consumen energía contaminante, y esa afirmación requiere una amplia matización. La producción de frio, tato para climatización, como para refrigeración en la conservación de alimentos u otras aplicaciones frigoríficas, puede ser realizada mediante equipos de comprensión que consumen electricidad, pero también con máquinas que consumen energía térmica. Ya nuestro Premio Nobel Echegaray justificaba como con calor se podía producir frio, mediante máquinas térmicas. Por ejemplo, captando la energía solar en forma de calor, se puede generar frio, y producir hielo, con máquinas de absorción diseñadas ya desde el siglo XIX. Por tanto, muy al contrario de lo que dice el informe, el aire acondicionado puede utilizar energías renovables y reducir el consumo de energías fósiles.
No obstante, la mayoría de los equipos de producción de frio, para cualquier aplicación, son de comprensión, y consumen electricidad. Pero el usuario no es nunca responsable del origen de la electricidad que consume, sea de origen fósil, nuclear o renovable. Esta responsabilidad es exclusivamente del productor de la energía, y en segundo lugar, de la política energética del gobierno.
Por tanto, en Europa el sector del frio no contamina, y consume la energía que le permiten, sin tener capacidad para seleccionar su origen. No obstante, lo que si es cierto, es que la producción de frio, siempre consumirá energía, y si esta es eléctrica, participará, como todos los consumidores de esta energía en calentar nuestro ecosistema. Pero en termotecnia, podemos encontrar incluso soluciones que permitan un balance térmico final positivo, la cuestión es que económicamente sea de interés para el usuario.
Lo que es de gran interés, es que el sector del frio genere la preocupación de las grandes instituciones mundiales, y se intente evitar la competencia desleal de fabricantes que no cumplan los compromisos supranacionales, pues sus gobiernos no se acogen a los convenios internacionales.
Por ejemplo, el portal de Internet: Refrigeración eficiente, tiene por objeto mejorar la eficiencia energética en el sector de la refrigeración: https://www.ccacoalition.org/en/initiatives/efficient-cooling#init-content, como resultado de la iniciativa puesta en marcha en la reunión de Ministros de Medio Ambiente del G7 en 2019 en Metz, Francia.
A través de la Iniciativa de Enfriamiento Eficiente, los socios de la Coalición tratan de abordar los desafíos clave relacionados con la integración de la eficiencia energética dentro de la eliminación gradual de los HFC en el marco del Protocolo de Montreal. La Iniciativa está trabajando para crear apoyo político de alto nivel y concienciación sobre la necesidad crucial de mejorar la eficiencia energética enfriada y evitar la necesidad de más refrigeración, al tiempo que se difunde información y conocimientos especializados y se moviliza financiación para la eficiencia energética en el sector de la refrigeración. En su fase inicial, la Iniciativa de Enfriamiento Eficiente se centra en: Eventos de alto nivel para sensibilizar sobre la necesidad de mejorar la eficiencia energética, sobre alternativas y tecnologías eficientes y la transformación del mercado, y sobre recursos adicionales para mejorar la eficiencia energética de los equipos de refrigeración Actividades técnicas, con el objetivo de difundir las mejores prácticas y lecciones aprendidas y aumentar la comunicación entre actores importantes del sector de la refrigeración El objetivo general de la Iniciativa de Refrigeración Eficiente es catalizar las medidas sobre el enfriamiento eficiente para duplicar el beneficio climático de la enmienda Kigali HFC. La Iniciativa lo logrará mediante: Generar una mayor conciencia y apoyo en los niveles políticos y superiores de los gobiernos, con respecto a las políticas, reglamentos, normas y otras acciones para facilitar la penetración en el mercado de tecnologías alternativas eficientes energéticamente, de bajo GWP en el sector de la refrigeración Identificar y movilizar recursos adicionales para ayudar a los países en desarrollo a mejorar la eficiencia energética de los equipos de refrigeración y, al mismo tiempo, reducir gradualmente los HFC Mostrar refrigerantes y tecnologías alternativas, incluyendo, pero no limitado a alternativas a los sistemas de ciclo de compresión de vapor, tales como refrigeración evaporativa, y métodos para reducir la demanda de refrigeración (aislamiento del edificio, sombreado de la fachada y revestimiento del techo) Realmente, la pandemia de 2020 ha paralizado el progreso y desarrollo de todas estas iniciativas en favor de un progreso coherente y eficiente del sector del frio, pero no podrá impedir su deseada evolución.
También es de destacar que el reportaje publicado en la Revista tendencias 21 sobre el informe conjunto referido, es el más extenso y completo, ya que en otros casos, han aparecido simples notas de prensa sobre tan trascendente acontecimiento.
Según la oficina de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (United Nations Environment Programme) y la Agencia Internacional de Energía (International Energy Agency), se estima que casi un tercio de la población mundial se enfrenta temperaturas peligrosas durante más de 20 días al año, mientras que las olas de calor causan 12.000 muertes al año. Mantenerse fresco es un problema de salud y productividad. Necesitamos proporcionar un acceso equitativo a la refrigeración para proteger a las personas contra el calor extremo, mantener los alimentos frescos, las vacunas estables y mucho más. Pero a menos que cambiemos nuestro enfoque, la creciente demanda de refrigeración contribuirá significativamente al cambio climático, en parte a través de las emisiones de HFC y otros refrigerantes, y en parte a través de las emisiones de CO2 y carbono, de fuentes de energía basadas en combustibles fósiles, que alimentan los aires acondicionados y otros equipos de este análisis. En este momento, a medida que el clima se calienta, la creciente demanda contribuye a un mayor calentamiento, pero existen diferentes opciones. Este informe de síntesis explora los beneficios climáticos y económicos de la implementación de la política de Kigali y al mismo tiempo mejora la eficiencia de la refrigeración para las personas y el planeta. (https://wedocs.unep.org/handle/20.500.11822/33094
Ya en el reportaje de la Revista tendencias21, se indicaba: Se estima que hay 3.600 millones de equipos de refrigeración en uso en todo el mundo, que abarcan tanto a aparatos de aire acondicionado como neveras y congeladores.
El informe del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente estima que, si los equipos de refrigeración se generalizan a todas las personas que los necesitarán en un contexto de calentamiento global, estarán en funcionamiento hasta 14.000 millones de aparatos de refrigeración en el año 2050.
El informe dice también que, aunque los dispositivos de enfriamiento como los aires acondicionados y los refrigeradores, son cruciales para la salud humana, las emisiones de los combustibles fósiles utilizados para alimentarlos, podrían empeorar el cambio climático.
Especifica que la creciente demanda de refrigeración está contribuyendo significativamente al cambio climático, debido al consumo de combustibles fósiles que alimentan a los aires acondicionados y otros equipos de refrigeración.
E incluso se añadía en el reportaje, de conformidad con lo expresado por el referido informe: Los aparatos de aire acondicionado están en la diana del calentamiento global porque consumen energía contaminante y además emiten hidrofluorocarbonos, unos gases de efecto invernadero mucho más dañinos para el medio ambiente que el dióxido de carbono (CO2).
Se desencadena así un círculo vicioso que se retroalimenta continuamente: la escalada de la temperatura aumenta las necesidades de refrescar el aire que respiramos, y ese servicio tecnológico aumenta todavía más el calor del entorno en el que vivimos.
En 1987, el Protocolo de Montreal estableció un plan para eliminar los contaminantes nocivos en el uso de los refrigerantes.
En 2019, entró en vigor enmienda al citado protocolo con la finalidad de reducir la producción y el consumo de hidrofluorocarbonos (HFC) en más de un 80% durante los próximos 30 años, pero todavía no lo han firmado los países más contaminantes, como Estados Unidos, India y China.
Pero es necesario matizar estas afirmaciones, por un lado, en Europa existe ya una normativa coherente con el Protocolo de Montreal, por lo que este sector ya no usa hidrofluorocarbonos (HFC), por lo que no plantean esa posible nociva contaminación. Son los grandes consumidores de frio: Estados Unidos, India y China, los que incumplen el acuerdo y siguen contaminando la atmosfera con los HFC.
Por otro lado, en el reportaje se decía también que los aparatos de aire acondicionado…consumen energía contaminante, y esa afirmación requiere una amplia matización. La producción de frio, tato para climatización, como para refrigeración en la conservación de alimentos u otras aplicaciones frigoríficas, puede ser realizada mediante equipos de comprensión que consumen electricidad, pero también con máquinas que consumen energía térmica. Ya nuestro Premio Nobel Echegaray justificaba como con calor se podía producir frio, mediante máquinas térmicas. Por ejemplo, captando la energía solar en forma de calor, se puede generar frio, y producir hielo, con máquinas de absorción diseñadas ya desde el siglo XIX. Por tanto, muy al contrario de lo que dice el informe, el aire acondicionado puede utilizar energías renovables y reducir el consumo de energías fósiles.
No obstante, la mayoría de los equipos de producción de frio, para cualquier aplicación, son de comprensión, y consumen electricidad. Pero el usuario no es nunca responsable del origen de la electricidad que consume, sea de origen fósil, nuclear o renovable. Esta responsabilidad es exclusivamente del productor de la energía, y en segundo lugar, de la política energética del gobierno.
Por tanto, en Europa el sector del frio no contamina, y consume la energía que le permiten, sin tener capacidad para seleccionar su origen. No obstante, lo que si es cierto, es que la producción de frio, siempre consumirá energía, y si esta es eléctrica, participará, como todos los consumidores de esta energía en calentar nuestro ecosistema. Pero en termotecnia, podemos encontrar incluso soluciones que permitan un balance térmico final positivo, la cuestión es que económicamente sea de interés para el usuario.
Lo que es de gran interés, es que el sector del frio genere la preocupación de las grandes instituciones mundiales, y se intente evitar la competencia desleal de fabricantes que no cumplan los compromisos supranacionales, pues sus gobiernos no se acogen a los convenios internacionales.
Por ejemplo, el portal de Internet: Refrigeración eficiente, tiene por objeto mejorar la eficiencia energética en el sector de la refrigeración: https://www.ccacoalition.org/en/initiatives/efficient-cooling#init-content, como resultado de la iniciativa puesta en marcha en la reunión de Ministros de Medio Ambiente del G7 en 2019 en Metz, Francia.
A través de la Iniciativa de Enfriamiento Eficiente, los socios de la Coalición tratan de abordar los desafíos clave relacionados con la integración de la eficiencia energética dentro de la eliminación gradual de los HFC en el marco del Protocolo de Montreal. La Iniciativa está trabajando para crear apoyo político de alto nivel y concienciación sobre la necesidad crucial de mejorar la eficiencia energética enfriada y evitar la necesidad de más refrigeración, al tiempo que se difunde información y conocimientos especializados y se moviliza financiación para la eficiencia energética en el sector de la refrigeración. En su fase inicial, la Iniciativa de Enfriamiento Eficiente se centra en: Eventos de alto nivel para sensibilizar sobre la necesidad de mejorar la eficiencia energética, sobre alternativas y tecnologías eficientes y la transformación del mercado, y sobre recursos adicionales para mejorar la eficiencia energética de los equipos de refrigeración Actividades técnicas, con el objetivo de difundir las mejores prácticas y lecciones aprendidas y aumentar la comunicación entre actores importantes del sector de la refrigeración El objetivo general de la Iniciativa de Refrigeración Eficiente es catalizar las medidas sobre el enfriamiento eficiente para duplicar el beneficio climático de la enmienda Kigali HFC. La Iniciativa lo logrará mediante: Generar una mayor conciencia y apoyo en los niveles políticos y superiores de los gobiernos, con respecto a las políticas, reglamentos, normas y otras acciones para facilitar la penetración en el mercado de tecnologías alternativas eficientes energéticamente, de bajo GWP en el sector de la refrigeración Identificar y movilizar recursos adicionales para ayudar a los países en desarrollo a mejorar la eficiencia energética de los equipos de refrigeración y, al mismo tiempo, reducir gradualmente los HFC Mostrar refrigerantes y tecnologías alternativas, incluyendo, pero no limitado a alternativas a los sistemas de ciclo de compresión de vapor, tales como refrigeración evaporativa, y métodos para reducir la demanda de refrigeración (aislamiento del edificio, sombreado de la fachada y revestimiento del techo) Realmente, la pandemia de 2020 ha paralizado el progreso y desarrollo de todas estas iniciativas en favor de un progreso coherente y eficiente del sector del frio, pero no podrá impedir su deseada evolución.
También es de destacar que el reportaje publicado en la Revista tendencias 21 sobre el informe conjunto referido, es el más extenso y completo, ya que en otros casos, han aparecido simples notas de prensa sobre tan trascendente acontecimiento.